miércoles, 22 de agosto de 2007

Casi ridículo (2p)


Prácticamente es como hacer el ridículo,
todos buscamos recordar la razón por la cual decidimos abrir el camino a la posibilidad de recordar.

Lo extraño comienza cuando quieres recordar algo simplemente por el hecho de recordar... entonces es cuado empiezas a rebuscar y rebuscar

y Alucinar

(realmente de manera inconsciente)

hasta que llegas a una razón, la razón que nunca hubieses querido llegar a conocer si hubieses sabido cuál era,
aquella razón que perduró muy sumisa, sumida en si misma,
sentada y ya vacía de carisma, extrañamente-móvil, mirándote directamente a tus ojos perplejos, retorciendo su cabeza sin coherencia alguna, probablemente con la lengua afuera, seguramente con las piernas abiertas...
Cabizbaja continúa su demente convulsión tan compulsiva, afectando cada intento de pensamiento racional dentro de lo irracionalmente conocido,
cada búsqueda intensiva de locura escondida en nuevos paradigmas ya viejos y demasiado pútridos de extraña nostalgia al ridículo,
extraña nostalgia al nerviosismo de evadir al inevitable cosquilleo cuasi-eyaculatorio producido por un simple olor,
el infinito placer extrañado por el simple hecho de no existir razón otra para extrañarlo más que el no tener otra descripción mas que inefablemente faltante.

Inefable fuiste e inefable te recordaré hasta tener una imagen distinta a inefable... tú, Impredecible sibarita… tan lejana y tan bonita!


Dedicado a una persona que cambió mi forma de ver la vida en realmente muy poco tiempo. Gracias.

viernes, 17 de agosto de 2007

Mas mentiras.


Regularmente es necesario,
totalmente indispensable,
darse cuenta
(una vez mas)
de la indiscutible degeneración imaginativa de la básica complejidad de la mente
la inigualable singularidad que cada vez esta menos presente
opacada por los cerebros de la gente
(aunque no los usen muy bien)
Inevitablemente obligandonos a recurrir inconscientes
a abstracciónes psicodélicas realmente inexistentes,
a apegarnos a entes lejanos que mas nunca tendremos entre las manos
a repugnantes pero artísticos venenos cilíndricos...
y especialmente a tí.

sábado, 4 de agosto de 2007

Descarga brívida.




Me arrepiento profundamente de haber pensado que venias,
sucumbí imbécilmente ante mi eterna ingenuidad,

Ingenuidad que recuerda momentos como en el que se decide si conformarse con sobrevivir ante facilismos o si darlo todo existiendo la posibilidad de que nazca algo diferente a lo mismo...
Y explotar.



Nunca pensaré siquiera en la inmensa estupidez que sería olvidarme de tu grotesca forma de beber,

La cual inspiraba a mi alcoholismo a continuar más lentamente

Para poder disfrutarte al máximo,
Tus modismos acentuados de los cuales me contagie inevitablemente

(Seguramente a propósito),

Que provocaban a mi boca como miles de tentaciones

A morder la tuya y saborearla por siempre.
Los millones de aromas irreconocibles que expelían nuestras pieles al encontrarnos por pura casualidad,

Olores que inspirarán durante cierto tiempo cada letra que escriba con la misma mano con la que tanto adoré rozar la tuya como una falsa casualidad sin coincidencia...
Degustando siempre en mi mente cada residuo nicotínico robado de tu saliva en mis labios, que morderé recordándote.
Esperando olvidar que no pude dejar de pensar que vendrías, y aquí seguiré pensando en el tiempo perdido mientras pensaba en Mochima,

en el tiempo que pasará mas rápido si me encuentro ebrio hasta llegar a Perú,

en los instantes que pasarán solo porque deben pasar,

mientras tanto he de continuar con esta falsa realidad dependiendo de varios deseos ya reprimidos, deseos de diferentes procedencias, que me hiciste recordar,

que permanecían en el olvido en el que vivo

mientras me revuelco en el espacio especial que yo mismo he creado,

el espacio de mi mente,

mi y nuestra gran habitación blindada la cual decoraré con cada partícula espacial que me recuerde aquella destrucción en Brasil...

Ésta destrucción en Mi país sin nombre… desde hace ya varios años…
Atentamente.
Yo.